La mujer fue declarada culpable de tentativa de homicidio y privación de libertad. La investigación demostró que obligaba a comer jabón a la menor, la mantenía amarrada y la quemaba con cigarros
El Tribunal Penal de Pérez Zeledón condenó esta mañana a 27 años de prisión a Jenny Jiménez Alvarado por la brutal tortura contra su nieta de solo cinco años.
La Fiscalía demostró en su acusación que Jiménez obligaba a la menor a comer jabón, la mantenía amarrada en un pequeño cuarto y la quemaba con cigarros.
Así fue hallada la niña a la que el PANI rescató y que vivía con su familia en una humilde vivienda, que fue allanada la mañana de este miércoles por parte de agentes del OIJ.
A ella se le sentenció a 20 años de prisión por el delito de tentativa de homicidio calificado y siete por el de privación de libertad.
La historia conmocionó al país en 2017 cuando el Organismo de Investigación Judicial, por alerta de un vecino, realizó un allanamiento a la vivienda donde mantenían retenida a la menor, ahora de siete años.