Los médicos han descubierto una fruta con el nombre sonoro “arhat” (latín Siraitia grosvenorii) puede retrasar el proceso de envejecimiento. Un estudio relacionado realizado por científicos chinos fue publicado en The American Journal of Chinese Medicine.
Los científicos realizaron un experimento donde ratones consumieron arhat, también conocida como “La fruta de Monje” durante 10 meses, el proceso de envejecimiento se ralentizó. La fruta tiene efectos positivos sobre la médula ósea roja, mejorando las funciones de las células madres hematopoyéticas, los precursores de las células sanguíneas que contribuyen a la regeneración.
Además, es altamente probable que los resultados en ratones tenga los mismo efectos en los humanos.
“En base a estos resultados, el equipo de investigación llegó a la conclusión que comer arhat puede extender la vida de una persona al mejorar la función de las células madre”, dice la revista médica.