Al compromiso del Gobierno con la regla fiscal le falta superar muchas pruebas, mientras que la desaceleración económica dificultará que los ingresos públicos alcancen la meta esperada, señaló la agencia calificadora de riesgo Moody’s.
El miércoles Moody’s publicó un reporte en el que estudia a fondo las razones detrás del recorte en la calificación de riesgo de Costa Rica de B1 a B2 y que dejó al país cinco escalones por debajo del grado de inversión.
«El hecho de que los partidos políticos y las instituciones del Gobierno no generen reformas suficientes a menos de que se vean presionados por una crisis, es el principal desafío de gobernanza de Costa Rica», consideró el reporte anual liderado por el analista Gabriel Torres.
– ¿Qué opinan de las potenciales reformas que está proponiendo el gobierno en términos de impacto y viabilidad política?
«Primero, la reforma (fiscal) que se hizo hay que terminar de implementarla y por sí misma no es suficiente. Segundo, estamos a la espera de ver qué más se hace, pero no tenemos una opinión sobre si es más fácil hacer una cosa o la otra, como aumentar el impuesto, o bajar el gasto, etc.
«Lo que creo que sí se ha demostrado es que a Costa Rica le cuesta poder bajar su déficit… ha sido un problema.
«Lo que estamos señalando es que el Gobierno ha dicho que quiere hacer algunas otras cosas, pero la duda que tenemos es si se va a lograr hacer algo de esto.
«Ya que pasaron una reforma y -a pesar de todo- el déficit llegó a un nivel históricamente alto, sería muy muy importante ver cómo termina el 2020. Y si se ven obligados a tomar una decisión de hacer más que lo que han hecho hasta ahora».
– ¿Les sorprendió la cifra del déficit del 7% con que cerró el 2019?
«Sí nos sorprendió. Lo que el Gobierno dice es que gastó más en ciertas áreas, como el gasto de capital, un mayor gasto de intereses y algunos fondos para la CAF; pero creo que la señal es que cuando aumentaron los impuestos, porque los ingresos aumentaron un 8%, en vez de aprovechar esa oportunidad para reducir el déficit terminaron gastando más de lo planeado originalmente, entonces desde el punto de vista crediticio no es una buena señal»
– ¿Cómo ven la situación actual de Costa Rica? ¿Consideran que estamos en una crisis fiscal?
«Como mínimo tienen presiones fiscales (…) Un país que pasa de tener deuda del PIB del 25%, que era más o menos la que tenía en el 2009 o 2010, a más de 60%, que es lo que esperamos ahora, es un país que si no está en crisis fiscal, está muy cerca.
«Mi visión con respecto a esto es que cuando un Gobierno pide prestado, hay tres etapas: la etapa en que te prestan a una tasa que te conviene, después una etapa en que te prestan a una tasa alta y luego está la etapa en que no te prestan más.
«Costa Rica está en la etapa dos, y el riesgo es que en algún momento pase algo más. Por ahora le siguen prestando, pero si te fijas en los niveles a los cuales tiene que pedir prestado el gobierno, son muy altos.
«Costa Rica tiene hoy creo que el tercero o cuarto nivel más alto de tasas internacionales en dólares de toda Latinoamerica. Solamente Venezuela, Argentina y creo que El Salvador, tendría que fijarme, tienen más altas.
«Todos los demás tienen tasas más bajas y países como Guatemala y Honduras tienen tasas que están a la mitad de las de Costa Rica».
-¿Consideran que el país puede evitar llegar a un nivel de deuda del 60% del PIB este año?
«Tendrían que bajar muchísimo el déficit, mucho, y eso no lo veo. Pero para nosotros no hay un número mágico; si pasa del 59% al 61% no cambia mucho. En este momento creo que nuestra proyección es de un 62%. Y si la economía crece un poco más, si el PIB crece un poco más, tal vez eso ayude pero en la medida en que tienen déficits tan altos del 6%, 5% ni hablar del 7% del PIB, la deuda va a seguir aumentando.
«Hasta que el déficit no baje a 2,5%, la deuda va a seguir aumentando».
– ¿Ustedes qué ven como una de las mayores preocupaciones la institucionalidad?
«Les cuesta mucho aprobar reformas para reducir el déficit».
– ¿Cuáles serían otros riesgos que ven para el país?
«Hay todo tipo de preocupaciones del mundo exterior que pueden afectar, tomemos por decir algo el coronavirus, aunque no afecte directamente a Costa Rica en el sentido que no haya muchos casos, basta que la población internacional diga que va a viajar menos, para que se afecte por ejemplo los ingresos del turismo, o del comercio, que haya menor demanda de los productos que se producen en zona franca.
«Entonces el riesgo de un shock externo, podría ser eso o podría ser una caída en la economía de Estados Unidos, hay muchas cosas.
«Hasta ahora, todos estos años en que Costa Rica ha tenido el problema fiscal, la economía ha crecido siempre, ahorita crece un poquito menos pero siempre ha crecido.
«Ahora imagínate que tengas un problema fiscal y una economía que no crece.
«Lo que nosotros estamos tratando de medir es qué pasa si hay en un shock, ¿cómo se maneja?
«Un país como Costa Rica, si hoymtiene un shock, la capacidad de lidiar con ese shock es muy inferior a la que tenía en el 2010, porque tiene 40 puntos del PIB más de deuda y por lo tanto su capacidad de pedir prestado para manejar la crisis, cayó.
«Obviamente es nuestra opinión pero no es algo que estamos sacando de la nada, estamos simplemente señalando un problema que tiene hace ya una década».
– ¿Qué proceso sigue ahora?
«Por ahora ya hemos tomado una decisión, así que por el momento no vemos necesidad de hacer más nada, pero seguiremos viendo que sucede y que resultados hay y demás. En general revisamos una vez al año así que hasta el año viene no tendríamos necesidades».
Vía – Elobservadorcr