El presidente Joe Biden dijo el viernes que Estados Unidos y sus socios internacionales deben hacer que China rinda cuentas por sus prácticas económicas.
“Tenemos que rechazar los abusos y la coerción del gobierno chino que socavan los cimientos del sistema económico internacional”, dijo Biden en un discurso en la Conferencia de Seguridad de Munich, pronunciado virtualmente desde la Casa Blanca.
“Todos deben seguir las mismas reglas”, dijo en la reunión anual de política internacional.
La aparición de Biden, su debut ante una audiencia internacional desde que se convirtió en presidente, se produjo cuando su administración busca mantener una postura dura sobre China mientras se aleja de la relación pugilista del ex presidente Donald Trump con Beijing.
La administración Trump buscó remodelar la relación comercial entre Estados Unidos y China, poniendo un enfoque clave en impulsar la compra de productos estadounidenses por parte de Pekín y al mismo tiempo abordar problemas que incluyen protecciones de propiedad intelectual y transferencias tecnológicas forzadas.
Después de alcanzar la primera “fase” de un acuerdo, Trump canceló en 2020 una ronda adicional de conversaciones comerciales con China, a la que ha culpado por completo de la propagación de la pandemia de coronavirus.
El espíritu político de “Estados Unidos primero” de Trump también alienó a algunos líderes europeos que habían estado aliados durante mucho tiempo con Estados Unidos. Biden ha dejado en claro que tiene la intención de fortalecer las relaciones con los socios internacionales de Estados Unidos.
“Sé que los últimos años han tensado y puesto a prueba nuestra relación transatlántica. Pero Estados Unidos está decidido a volver a comprometerse con Europa”, dijo Biden al comienzo de su discurso el viernes.
Antes de pronunciar sus declaraciones, Biden se reunió con los líderes del G7, el grupo de naciones que incluye a Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos, para discutir una respuesta global a la pandemia de Covid.
En una declaración conjunta posterior a esa reunión, el G7 prometió “trabajar juntos y con otros para hacer de 2021 un punto de inflexión para el multilateralismo”.
La declaración del G7 también anunció que los países miembros comprometerían $ 7.5 mil millones en fondos para COVAX, una iniciativa internacional que tiene como objetivo aumentar el acceso a las vacunas Covid. La Casa Blanca dijo el jueves que Estados Unidos se comprometería con 4.000 millones de dólares hasta 2022 para los esfuerzos de vacunación mundial.
La reunión del G7 también se refirió a China, según el comunicado. “Con el objetivo de apoyar un sistema económico global justo y mutuamente beneficioso para todas las personas, nos comprometeremos con otros, especialmente con los países del G20, incluidas las grandes economías como China”, dijo.
Biden fue más lejos en su discurso.
“Las empresas estadounidenses y europeas deben divulgar públicamente las estructuras de gobierno corporativo … y acatar las reglas para disuadir la corrupción y las prácticas monopólicas. Las empresas chinas deben cumplir el mismo estándar”, dijo el presidente.
“Debemos defender los valores democráticos que hacen posible lograr algo de esto, haciendo retroceder a aquellos que monopolizarían y normalizarían la represión”, dijo Biden.
La embajada de China en Estados Unidos no respondió de inmediato a la solicitud de CNBC de comentar sobre el discurso de Biden.
El presidente señaló que “así es también como vamos a poder enfrentar la amenaza de Rusia”, que quiere “debilitar el proyecto europeo y nuestra alianza de la OTAN”.
“Los desafíos con Rusia pueden ser diferentes a los de China, pero son igualmente reales”, dijo Biden.
“No se trata de enfrentar al Este contra el Oeste. No se trata de, queremos un conflicto. Queremos un futuro en el que todas las naciones puedan determinar libremente su propio camino sin una amenaza de violencia o coerción”, dijo Biden. “No podemos ni debemos volver a la oposición reflexiva y los bloques rígidos de la Guerra Fría”.
