La administración Biden está preparando planes para la entrada gradual de migrantes obligados a permanecer en México bajo una polémica política de la era Trump, según tres funcionarios de Seguridad Nacional.
El presidente Joe Biden se ha comprometido a poner fin a la política, conocida informalmente como «permanecer en México». Durante la última semana, la administración ha estado en discusiones en curso sobre cuándo comenzar a admitir lentamente a los migrantes, muchos de los cuales buscan asilo, en Estados Unidos, dicen dos funcionarios.
Un borrador de documento interno subrayó la importancia de tener en cuenta los protocolos de salud y seguridad, según dos funcionarios de Seguridad Nacional, y dijo que las admisiones probablemente comenzarían en dos lugares aún por anunciar.
No se ha establecido un cronograma para cuándo se llevará a cabo el cambio o cuántos migrantes calificarían inicialmente.
El DHS no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Bajo el expresidente Donald Trump, los migrantes de Centroamérica y otras partes del mundo que buscaban asilo en la frontera entre Estados Unidos y México se vieron obligados a permanecer en México hasta sus audiencias en la corte de inmigración de Estados Unidos. Eso significó esperar meses, si no años, en condiciones miserables y bajo la amenaza de extorsión, agresión sexual y secuestro.
La política fue una desviación sin precedentes de los protocolos anteriores, que permitieron la entrada de migrantes a medida que pasaban por sus audiencias de inmigración en los Estados Unidos.
La admisión de migrantes sujetos a la política de la era Trump es un esfuerzo complicado, dada la vulnerabilidad de la población y los desafíos en el proceso de comunicación y expectativas.
El secretario de Seguridad Nacional, Ali Mayorkas, le dijo a CNN a principios de este mes que ha estado involucrado en discusiones sobre el fin de la política de permanencia en México.
«La urgencia de eso tampoco puede ser exagerada», dijo.
Buscando una solución ‘justa y equitativa’
Las discusiones en curso se han centrado en cómo encontrar una «manera justa y equitativa» de comenzar a traer personas de regreso a los EE. UU., Dijo un funcionario del DHS, y agregó que una opción es colocar a las personas que fueron procesadas por primera vez bajo el programa al frente de la fila. .
Eso también plantea preguntas sobre cómo Estados Unidos procesa a los recién llegados y qué sucede con las personas que han estado esperando durante meses, dijo el funcionario, y agregó que las discusiones también han tenido en cuenta las precauciones de Covid-19.
Bajo la administración Trump, hubo un grupo de trabajo para evaluar si se podrían realizar audiencias virtuales para los migrantes que esperaban en México, pero nunca se les ocurrió una «solución viable», dijo el funcionario del DHS a CNN.
La pandemia cerró los tribunales de inmigración y retrasó los casos, lo que provocó que los migrantes se quedaran en México por períodos más prolongados y alimentara la frustración entre quienes esperaban por un período prolongado.
El funcionario dijo que aunque «el programa de la era Trump parecía tener un sesgo político, se hizo» por necesidad», advirtiendo que si la nueva administración termina el programa y otros, la Patrulla Fronteriza de los
Estados Unidos probablemente liberará a más migrantes en el país. EE.UU., pero los defensores y abogados de los inmigrantes han argumentado que el programa puso a los inmigrantes en peligro.
En sus primeras horas en el cargo, Biden detuvo la inscripción de nuevos migrantes al programa.
