Las negociaciones que este viernes retomaron dirigentes de los camioneros y el Gobierno de Chile para finalizar la paralización que se alarga por cinco días, terminaron sin acuerdo debido a las querellas por Ley de Seguridad del Estado interpuestas por el Ejecutivo.
“El Gobierno no va a aceptar condiciones en términos de impedir que el gobierno legítimamente use todas las facultades que el Estado de Derecho le da para garantizar el libre tránsito del país”, sostuvo durante la tarde el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, desde el Palacio de La Moneda.
“Hemos buscado responder a las demandas razonables que están detrás del movimiento, pero llegó el momento de que los dirigentes tomen la decisión de deponer el paro”, agregó la autoridad.
Horas antes, tras salir de la mesa de negociación, el presidente de la Asociación de Dueños de Camiones de Los Ángeles (Asoducam) y representante de los camioneros del sur, Freddy Martínez, explicó que pusieron “una condición” para llevar a cabo protestas pacíficas y que era que no hubieran querellas involucradas con los dirigentes, “pero lamentablemente nos ha comunicado el ministro subrogante del Interior que eso no ha sido posible”.
Por su parte, el presidente de la Confederación de Camioneros Fuerza del Norte, Cristián Sandoval, aseguró que “la movilización sigue” y que “hace responsable al Gobierno de cualquier eventualidad que pueda pasar”.
El paro, del que se restó una parte del gremio, empezó el lunes motivado por alzas al combustible e inseguridad en las carreteras.
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Monsalve informó que el Gobierno presentó 31 querellas por Ley de Seguridad del Estado en 8 regiones del país y, por ahora, hay 12 personas detenidas en el contexto de las movilizaciones. También indicó que hay 30 bencineras que no tienen abastecimiento de combustibles en el norte del país y 55 estaciones de servicio con problemas de abastecimiento.
Según los datos del Gobierno, hay 58 puntos en distintas rutas donde hay presencia de camioneros y cerca de 1.700 camiones.
Durante su visita a México, el presidente chileno, Gabriel Boric, señaló el jueves que el paro “afecta la vida de los chilenos y chilenas y no es contra el Gobierno, es contra la ciudadanía”.
El mandatario sostuvo que instruyó a los ministros a utilizar “todas las herramientas del derecho” para garantizar el funcionamiento del país y “proteger a los sectores más vulnerables”.
Monsalve, pidió el mismo día en la mañana a los camioneros “cuidar el país” y les exigió que “salgan de las rutas” que tienen tomadas.
Los camioneros, un colectivo que tiene un enorme poder de influencia en Chile desde que en la época de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) se abandonara el transporte ferroviario, han sostenido varias protestas en lo que va de año alegando motivos de falta de seguridad en las rutas.
Las movilizaciones de transporte en Chile tienen un impacto grande y directo en su economía, ya que no hay una alternativa al tránsito terrestre, lastrado por la falta de interés en el desarrollo de una amplia red ferroviaria durante la dictadura.
Con información de EFE
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