La Contraloría General de la República (CGR) llama la atención al Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) por ejercer un débil control sobre los contratos firmados con la oficina de Naciones Unidas (ONU) para proyectos.
Esta oficina, conocida por las siglas Unops, tiene a su cargo obras como la construcción del nuevo puente sobre el río Virilla en la ruta 32.
El ente contralor realizó una auditoría para verificar el cumplimiento de los controles por parte el Conavi sobre Unops.
Con este organismo se han contratado cinco proyectos, por un monto de $148 millones.
Los resultados de la auditoría demuestran que el Conavi no está asegurando razonablemente el cumplimiento de los objetivos.
El estudio concluye que el Conavi no tiene un control adecuado sobre el avance de las obras ni tampoco sobre la adecuada ejecución de los presupuestos asignados a cada obra.