Los estudiantes en Costa Rica regresaron a las clases presenciales el lunes después de casi un año de recibir lecciones a distancia debido a la pandemia Covid-19.
Se reanudaron las clases presenciales para los alumnos de mayor edad: quinto y sexto grados de educación primaria, y los de noveno, décimo y undécimo de educación secundaria, según las autoridades educativas.
Un total de 1,19 millones de niños, niñas y jóvenes están matriculados en el sistema educativo público, que regresó a clases bajo un modelo que combina clases presenciales y a distancia.
La reanudación de las lecciones presenciales se produce en un momento en que los casos de Covid-19 muestran un marcado descenso en este país de 5 millones de habitantes, que ya inició una campaña de vacunación para trabajadores de salud y seguridad, así como para adultos mayores.
Después de poco más de 1.000 casos diarios de nuevas infecciones por Covid-19 a principios de enero, Costa Rica ha registrado entre 400 y 500 casos diarios desde la segunda semana de ese mes.
El regreso a las clases presenciales fue recibido con entusiasmo por muchos jóvenes que se reencontraron con sus compañeros, pero también con miedo e incertidumbre para muchos padres que prefirieron no enviar a sus hijos por temor al contagio del coronavirus.
“Agradezco volver a las clases presenciales para compartir con mis compañeros e implementar la nueva modalidad presencial y virtual. Vamos a sacarle el máximo partido”, dijo la estudiante Zeidy Huete, del Colegio Técnico Profesional de la localidad de Purral, en el noreste del área metropolitana.
En esa escuela se realizó la ceremonia oficial de inicio de clases, que aplicó rigurosas reglas de distanciamiento y limpieza para evitar la propagación del Covid-19.
“Este regreso seguro a clases, con todos los protocolos de salud requeridos y con una modalidad educativa combinada, es parte de nuestro compromiso de luchar por una educación de calidad para todas las personas, sin distinción, en todo el país”, dijo el presidente Carlos Alvarado en el acto.
A su vez, la viceministra de Educación, Melania Brenes, indicó que los meses de febrero y marzo servirán de pruebas para ampliar el número de alumnos que pueden volver a las clases presenciales.