Los residentes de la Gran Área Metropolitana pronto notarán una nueva incorporación al sector de transporte público de Costa Rica.
El Instituto Costarricense de Ferrocarriles (INCOFER) está listo para presentar los ocho vagones de trenes diesel autopropulsados que recibió en los últimos meses.
“Luego de un proceso de tres meses de capacitación para el personal de conducción y pruebas de las 8 nuevas unidades de tren adquiridas a la empresa CRRC Quingdao Sifang Co, el equipo está listo para el inicio de operación gradual con pasajeros”, dijo INCOFER en un comunicado.
Cada uno de los trenes tiene una longitud de 38 my una capacidad para 372 pasajeros, el doble de la capacidad de los vagones actuales. Las comodidades a bordo incluyen aire acondicionado, asientos preferenciales para personas con problemas de movilidad y espacios para sillas de ruedas.
Los trenes, comprados a la empresa china CRRC Qingdao Sifang Co. por 32,7 millones de dólares, contaminan “un 90% menos que los trenes actuales”, según la Presidencia. El precio de compra también incluye equipo de taller, repuestos, formación y soporte postventa durante tres años.
“Estamos emocionados de ver cómo la modernización ferroviaria avanza de manera constante en nuestro país con la implementación de este nuevo equipo, que representa la mayor compra en los últimos 40 años de INCOFER y la primera vez en la historia de nuestro país que nuevos autopropulsados se ha adquirido equipo para pasajeros”, dijo Elizabeth Briceño, presidenta de INCOFER.
Costa Rica reenfoca su ferrocarril
Si bien estos nuevos trenes son diesel, Costa Rica eventualmente planea crear una red de trenes de pasajeros eléctricos como parte integral de su plan de descarbonización.
En 2020, el gobierno presentó sus planes para los 84 km de vías férreas que contarían con 46 estaciones en el Gran Área Metropolitana densamente poblada. Una vez finalizado, el tren eléctrico urbano transportaría a 200.000 personas cada día, uniendo las ciudades de Cartago, San José, Heredia y Alajuela.
“Será el proyecto de concesión más grande del país y transformará a nuestra nación en movilidad, salud y competitividad”, dijo en ese momento el presidente Carlos Alvarado.
Un ferrocarril robusto evoca recuerdos del pasado de Costa Rica, cuando los trenes jugaron un papel importante en el desarrollo del país.
En 2019, el gobierno comenzó a explorar la viabilidad del Proyecto del Tren Eléctrico de Carga de Limón, o TELCA, que modernizaría tramos de ferrocarril entre Limón y Río Frío, y entre Limón y Valle de la Estrella, así como explorar la viabilidad de un nuevo tramo entre Río Frío y Bajos de Chilamate.
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INCOFER también está analizando la reconstrucción de su red ferroviaria desde el área de San José hasta Puntarenas en la costa del Pacífico. Esa infraestructura ha estado en mal estado después de los recortes presupuestarios y los daños causados por la construcción de la Ruta 27.
“Estamos seguros que esto contribuirá a la recuperación económica de la zona y generará empleo, y que también es un paso más para volver al legado ferroviario de nuestros abuelos en Costa Rica”, ha dicho Briceño.
Costa Rica News 24
