En apoyo a Juan Guaidó, el gobierno de El Salvador ordenó la noche del sábado la expulsión del cuerpo diplomático de Venezuela, y le dio como plazo 48 horas para abandonar el país.
El gobierno del presidente Bukele, ‘’reconoce la legitimidad del presidente encargado Juan Guaidó, mientras se realicen elecciones libres, en concordancia con la Constitución venezolana’’, indicó un comunicado de prensa de la presidencia de la República, publicado en la cuenta oficial de Twitter del mandatario salvadoreño.
“El gobierno de El Salvador expulsa al cuerpo diplomático del régimen de Nicolás Maduro, siendo coherente con las reiteradas declaraciones del presidente Nayib Bukele, en las que no reconoce la legitimidad del gobierno de Maduro”, señaló el texto.
Ronald Johnson, embajador de Estados Unidos en El Salvador, aplaudió la decisión del gobierno salvadoreño y reiteró su llamado a que: ‘’Maduro abandone el poder’’ para que se puedan llevar a cabo las elecciones.
‘’Aplaudimos al gobierno del presidente NayibBukele por asegurarse que El Salvador está del lado correcto de la historia al reconocer a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela’’, expresó Johnson en su perfil de Twitter.
El Salvador, dio un plazo de 48 horas a los diplomáticos del gobierno de Maduro para que abandonen el país, y mencionó que esperan en un futuro cercano, recibir las credenciales de la nueva representación diplomática del país suramericano.
El boletín de prensa hizo énfasis en que la representación salvadoreña se sumó a otros 20 países de la Organización de Estados Americanos (OEA), al aprobar en agosto pasado una resolución que respaldaba el informe de la Alta Comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Michelle Bachelet, ‘’donde se admitió y certificó que el régimen de Nicolás Maduro realiza violaciones sistemáticas a los Derechos Humanos contra los venezolanos’’.
Con la medida de El Salvador, ya son 50 los gobiernos que reconocen al líder opositor Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela, por considerar que la reelección de Maduro, en 2018 fue fraudulenta.