Gillermo del Toro, el cineasta que de niño pacto con sus montruos, reinvicó su condición de inmigrante al develar la estrella con su nombre en el Paseo de la Fama de Hollywood, en Estados Unidos.
«Como mexicano, recibir esta estrella es un gesto y ningún gesto ahora mismo puede ser banal o simple. Es muy importante que esté sucediendo ahora mismo», expresó el director, quien posó con una bandera mexicana.
Agregó del Toro que, «Esta estrella es para todos ustedes que se sienten raros, vengan y tómense un momento, no creo en la magia, pero sí puedo dejar algo de mí aquí hoy, así que estaré aquí espiritualmente para ustedes cada que quieran venir».
En el evento pidió a la sociedad que rechace «el miedo» y abrace el respeto, a la vez que instó a los migrantes a que no crean «las mentiras» que se dicen sobre ellos.
«Y puedo decirles a todos los inmigrantes de cualquier país que deben creer en las posibilidades y no en los obstáculos. Siempre. No crean las mentiras que dicen de nosotros. Crean en las historias que tienen dentro. Y crean en que todos podemos marcar la diferencia», añadió.
Durante la ceremonia asistieron como oradores la cantante de pop Lana del Rey y el reconocido director de películas como «Super 8» y los Episodios VII y IX de «Star Wars», WJ.J Abrams, donde dieron pequeños discursos para elogiar al cineasta mexicano.
Considerado como uno de los directores más prestigiosos del cine contemporáneo, Del Toro cuenta con dos Óscar con su nombre: mejor película y mejor dirección por «La forma del agua» (2017).
Su filmografía incluye también películas como «El laberinto del fauno» (ganadora en 2007 de los Óscar a mejor fotografía, mejor maquillaje y mejor dirección de arte), «Blade II» (2002), «Hellboy» (2004) o «Pacific Rim» (2013).
El discurso de Del Toro llegó apenas unos días después de que 22 personas fueron asesinadas, ocho de ellas mexicanas, en El Paso (Texas) en una matanza cometida el pasado sábado por un supremacista blanco que irrumpió a tiros en un centro comercial.
Fuente Infobae