El glaucoma se posiciona como una de las principales causas de ceguera irreversible a nivel mundial. A pesar de su alta prevalencia, esta enfermedad a menudo pasa desapercibida, manifestándose solo cuando ya es demasiado tarde para un tratamiento efectivo.
En Costa Rica, se estima que alrededor de uno de cada diez costarricenses mayores de 40 años presenta alguna forma de glaucoma. Sin embargo, solo un porcentaje limitado de estos casos logra ser diagnosticado a tiempo. Esta situación subraya la urgente necesidad de llevar a cabo campañas de concientización y programas de detección temprana que fomenten una mayor sensibilidad hacia la salud ocular.
La alimentación desempeña un papel crucial en la prevención del glaucoma. Por ello, a continuación, compartimos algunas recomendaciones que pueden ser de gran beneficio:
- Incluya en su dieta alimentos ricos en antioxidantes, como frutas y verduras frescas. Por ejemplo, los cítricos, como naranjas, limones y piñas, son excelentes fuentes de vitamina C.
- Consuma verduras de hoja verde, como espinacas y acelgas, que son ricas en luteína y zeaxantina, compuestos que podrían favorecer la salud ocular.
- Asegúrese de incorporar ácidos grasos omega 3 en su alimentación, presentes en pescados como el atún y el salmón, así como en fuentes vegetales como las semillas de chía y las nueces.
- Mantenga una dieta equilibrada, priorizando alimentos integrales, legumbres, frutas y verduras.
- Beba suficiente agua a lo largo del día, lo que puede ayudar a mantener un equilibrio en la presión intraocular.
- Reduzca el consumo de azúcares refinados y grasas saturadas, ya que están asociados con enfermedades que afectan los órganos y tejidos, aumentando así el riesgo de glaucoma.
- Realice actividad física de manera regular, como caminar o andar en bicicleta. Esto no solo mejora la salud en general, sino que también colabora en un mejor manejo de la presión ocular.
Aunque el glaucoma representa un desafío significativo para la salud pública en Costa Rica, tenemos la oportunidad de avanzar en la prevención y el tratamiento a través de la educación sobre nutrición y el acceso a servicios de salud. Adoptar un enfoque integral que combine la detección temprana, un tratamiento adecuado y una alimentación consciente puede contribuir a disminuir notablemente la incidencia y los efectos del glaucoma en nuestra población.
Dra. Gabriela Lara
Vocera del Colegio de Profesionales en Nutrición
Con información de | diarioextra.com
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