El hospital Rafael Ángel Calderón Guardia inició la atención de pacientes para estimar el riesgo de padecer cáncer por causa hereditaria y establecer medidas de prevención, detección temprana o diagnóstico oportuno cuando sea necesario. Esto como parte de su compromiso con los pacientes oncológicos y gracias a las gestiones del departamento de Hematooncología de este centro de salud.
La «Consulta de consejo oncológico» es la novedad en el abordaje del cáncer en el sistema de salud costarricense y marca un hito en la gestión gracias al abordaje de parte de un equipo multidisciplinario de especialistas de este centro de salud, pues es la primera vez que se hace el estudio de un posible cáncer heredado a partir de los antecedentes familiares.
Esta consulta sitúa a la institución en un plano de acción preventiva en cáncer nunca alcanzado, de la mano de la alta tecnología y aplicación de la genética aplicada a la ciencia médica.
Para Geiner Jiménez Jiménez, médico especialista en oncología de ese hospital, la consulta pretende ofrecer una valoración de riesgo y darle acceso a un diagnóstico molecular, como sucede en los países de más alto desarrollo.
Los resultados de la consulta permiten tomar decisiones basadas en información certera acerca de los riesgos y cuidados futuros de salud, como la necesidad de cambiar hábitos para reducir su riesgo de cáncer o estar pendientes de los exámenes necesarios para hacer la detección temprana del tumor, justo cuando es más fácil de tratar y dejan menos secuelas.
El resultado de las pruebas genéticas también es valioso en caso de ser un resultado negativo, pues conlleva el sentido de alivio sobre el riesgo futuro de cáncer, al saber que los hijos no tienen riesgo de heredar la predisposición al cáncer y el darse cuenta de que las pruebas o cirugías preventivas pueden no ser necesarias.
Todas esas acciones en conjunto podrían tener un impacto en la supervivencia al poder anticipar el riesgo de enfermedad y en los servicios de salud porque si se identifican personas que no tienen ese riesgo, podrían evitar realizarse pruebas diagnósticas innecesarias.
Proceso de participación.
Según indica el especialista, el proceso de atención es voluntario y, antes de realizar estas pruebas, las personas reciben información y aclaran dudas sobre los posibles resultados, su interpretación y su repercusión clínica.
Se estima que solamente el 5 al 10% de las personas con el diagnóstico de cáncer se debe a una predisposición hereditaria, por lo que las personas que se beneficiarían de esta consulta son aquellas que tienen algunos criterios, tales como: tener el diagnóstico de cáncer a una edad temprana (menos de 50 años), haber padecido de más de un tumor a lo largo de la vida, o tener en la familia muchas personas que hayan padecido de cáncer en algún momento de la vida.
En la primera etapa de este proyecto la atención de los pacientes y familias captadas con alto riesgo se realizará en el Hospital Rafael Ángel Calderón Guardia y, en la primera fase, se ha programado priorizar las siguientes Áreas de Salud, siguiendo la línea del programa institucional de detección temprana del cáncer:
• Valverde Vega
• Belén-Flores
• Santo Domingo
• San Isidro
• Atenas
• León XIII-La Carpio
• Tibás-Uruca-MercedTibás-Uruca-Merced
• Tibás Coopesaín.
• Goicoechea 2
• Moravia
El foco de atención en la comunidad se centrará en el cáncer de mama y el cáncer de colon y recto.
Consulta multidisciplinaria
El manejo del cáncer debido a una predisposición hereditaria requiere de una preparación específica, para la que la Caja Costarricense de Seguro Social ha apoyado y gestionado de manera que el personal mantenga una constante actualización en este tema.
Luego de una primera consulta de valoración, donde se recopilan los detalles de la historia de familia, se estima el riesgo de las personas y la probabilidad de presentar o transmitir a su descendencia una determinada susceptibilidad genética a desarrollar una neoplasia, se realiza un diagnóstico molecular y, según estos resultados, se plantea una estrategia para la prevención y el diagnóstico precoz del cáncer.
Esta valoración y manejo se logra mediante varias consultas en las que participan médicos oncólogos, profesionales de enfermería y de psicología, profesionales de microbiología expertos en realizar y analizar pruebas genéticas, entre otros.
El acceso a valoraciones por profesionales de psicología también puede brindar ayuda a las personas para comprender y adaptarse a este tipo de condiciones en las cuales debe comprender que el cáncer puede estar en el curso de su vida y puede estar preparado para ello.
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos en línea explica el proceso de la siguiente manera:
Los genes que hay en nuestras células cumplen funciones importantes. Influyen en el color de nuestro cabello y nuestros ojos, así como otras características transmitidas de padres a hijos. Los genes también ordenan a las células producir proteínas para ayudar al cuerpo a funcionar.
El cáncer sucede cuando las células comienzan a comportarse anormalmente. Cambios en los genes (mutaciones) ordenan a las células dividirse rápidamente y mantenerse activas. Esto lleva al crecimiento del cáncer y de tumores. Las mutaciones genéticas pueden ser resultado de daño al cuerpo o de algo que se haya heredado en los genes de su familia.
Taciano Lemos Pires, director general del hospital, indicó que este tipo de técnicas clínicas novedosas son de gran importancia y rescató la importancia de poder brindar a los costarricenses opciones para el diagnóstico de enfermedades como lo es el cáncer. El funcionario aseguró que el trabajo multidisciplinario es de vital importancia para que el abordaje de los pacientes sea lo más integral posible y poder atender en tiempo y forma a los asegurados.
Lemos Pires rescató que este tipo de iniciativas se unen a una serie de proyectos que está desarrollando el centro de salud para la atención de los pacientes con diversos tipos de cáncer, como las remodelaciones realizadas en el servicio de Hematología (con una inversión de $437.000), medicina nuclear (por un monto de ¢158.289.197,55), el inicio en el mes de julio anterior de la Consulta Externa de Radioterapia y otra serie de proyectos que unidos darán pie al inicio de la construcción de la Torre Oncológica en el año 2020.
Esta torre contará con 8 pisos, salas de espera, salas de aplicación de quimioterapia, salas de operaciones, radioterapia entre otros servicios de apoyo y novedades en el tratamiento de pacientes oncológicos y se espera su entrega para el año 2024.
Con información de elpaiscr