El implante de un dispositivo o bomba de infusión debajo de la piel del abdomen le permitirá a los pacientes con cáncer recibir medicamentos y por lo tanto no tener dolor y lograr una mejor calidad de vida.
La nueva terapia se aplica en el hospital México y es una alternativa para los asegurados que no responden a tratamientos de vía oral o inyectados, entre otras opciones.
“Estos dispositivos disponen de un tubo fino con el que se administra de forma continua la medicación, que por lo general es morfina, directamente en la médula espinal, en el área que se conoce como intratecal, es decir, dentro del saco que rodea a la médula espinal.
El impacto que se obtiene no sólo se relaciona con el manejo del dolor, sino también con una serie de variables que intervienen en el proceso de la enfermedad, como lo son las recurrentes visitas al servicio de Urgencias, la disminución de los efectos secundarios y en las hospitalizaciones. y otros gastos asociados con la atención”, afirmó el doctor Gabriel Carvajal, especialista en Cuidados Paliativos.
Cada dispositivo tiene un costo de $20.000 (más de 11 millones de colones) y para su colocación los pacientes deben cumplir con una serie de requisitos mediante un proceso de selección en el que intervienen especialistas en Medicina Paliativa y Oncología.
