Poco más del 75% de la población está de acuerdo o muy de acuerdo con el uso de los métodos anticonceptivos de emergencia, como la pastilla del día después, en casos de violación. Otro tanto (60,4%) está de acuerdo con su uso si la mujer está preocupada por haber tenido relaciones sin protección, y si duda de la efectividad del método usado (59,8%).
Así lo determinó la Encuesta Actualidades 2019 de la Universidad de Costa Rica (UCR), que abordó la actitud de los costarricenses hacia estos métodos, en un contexto en que la aprobación de la pastilla del día después reforzó las tensiones en el debate sobre los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres en el país.
Si hablamos de una escala de actitud en general, quienes poseen una actitud negativa hacia los anticonceptivos de emergencia son el 26,0% y el resto muestra una actitud regular (45,0%) o positiva (29,0%).
Asimismo, una de las conclusiones de los estadísticos es que a mayor educación, mayor conocimiento sobre dichos métodos. El más conocido es el de la “píldora del día después” o Levonorgestrel (63,5%) y un poco menos el método Yuzpe (11,8%).
Píldora del día después
En Costa Rica, el 29 de abril del año anterior un decreto presidencial autorizó la venta sin receta médica del producto Levonorgestrel.
El mandato del Ministerio de Salud y Casa Presidencial encendió el debate sobre los métodos anticonceptivos de emergencia y chocó con la oposición de diversos grupos religiosos y las mismas farmacias.
En su momento, el ministro de Salud, Daniel Salas, aclaró que “el único requisito para la venta de la ‘pastilla del día después’ es la asesoría del regente farmacéutico, ante la negativa de las farmacias de vender el producto por razones de edad o género.
“Si se está negando el acceso a este medicamento por el hecho de ser una adolescente o un hombre, está en contra de los derechos sexuales y reproductivos de la población (…) es un hecho científicamente comprobado que este medicamento no es abortivo”, añadió el ministro.
Los principales opositores, como la bancada legislativa de Restauración Nacional y el bloque independiente de Nueva República, mostraron su descontento con el decreto al aducir que la píldora es abortiva.
Según la encuesta, el 40,8% de los entrevistados está de acuerdo con que esté disponible para todas las personas sin necesidad de una receta médica, y el 50,5% está en desacuerdo.
El porcentaje que está de acuerdo resultó significativamente mayor en personas jóvenes (48,7%), con educación universitaria (56,6%) y que no practican alguna religión (51,0%).
¿Quiénes tienen actitudes negativas o positivas?
Según los investigadores, el grupo que se identificó con una actitud negativa está compuesto principalmente por mujeres (67,3%), por personas de 50 años y más (42,9%), con niveles de educación de primaria o menos (41,0%) y practicantes de alguna religión (88,8%).
Por otro lado, los que fueron calificados con una actitud positiva tienen un perfil distinto al descrito: el 63% tiene menos de 50 años, el 69% tiene nivel de secundaria o más y el 61% es practicante de alguna religión.
En la encuesta, a las mujeres se les preguntó si lo usaría en caso de ser necesario y 56,4% dijo que sí.
La recomendación hacia el uso, en el caso de los hombres, la hacen principalmente quienes tienen de 18 a 29 años (85,6%) y el uso en las mujeres sería mayor entre quienes tienen educación universitaria (63,7%).
El tema de anticonceptivos de emergencia fue desarrollado por los estudiantes Daniela Gamboa, Iván León y Nancy García; y se utilizó una muestra de más de 1200 entrevistas cara a cara que se realizaron en octubre pasado.
