En el 2024 los seres humanos volverán a pisar la Luna como parte del programa Artemisa que planea llevar por primera vez a una mujer al satélite terrestre. Recientemente la NASA presentó los trajes espaciales para estas misiones.
Las condiciones en la Tierra no son las mismas que las del resto del Sistema Solar. Fuera de nuestro planeta cuidadosamente controlado por la temperatura, la gravedad y la radiación, somos bastante frágiles.
Los trajes espaciales protegen a los astronautas del calor o frío excesivo, les dan oxígeno para que respiren mientras trabajan en el espacio y contienen agua para beber. Además, evitan que los astronautas se lastimen por el polvo espacial que, aunque puede no sonar muy peligroso, cuando se mueve más rápido que una bala puede lastimar a alguien.
Los trajes presentados hoy por la NASA mejoran los trajes que se usaban antes durante el programa Apolo y los que se usan actualmente para caminatas espaciales fuera de la Estación Espacial Internacional; y serán usados por la primera mujer y el próximo hombre mientras exploran la Luna.
Por un lado están los llamados Unidad de Movilidad Extravehicular de Exploración (xEM) que protegen el cuerpo del entorno externo, incluidas las temperaturas extremas, la radiación, los micrometeoroides y la presión atmosférica reducida.
Pero a diferencia de los primeros en pisar la superficie lunar, los astronautas de Artemis serán más ágiles que nunca gracias al perfeccionamiento de la movilidad en los nuevos trajes, con mejoras en los hombros para un mayor movimiento de la parte superior del cuerpo y guantes que permiten mover los dedos para un agarre más fácil.
Por el otro, el traje conocido como Orion Crew Survival System está diseñado para proteger a los astronautas el día del lanzamiento, en situaciones de emergencia, en partes de alto riesgo cerca de la Luna y durante el regreso a alta velocidad a la Tierra.
Su casco es más liviano, más fuerte, viene en más de un tamaño, ayuda a reducir el ruido y es más fácil de conectar al sistema de comunicaciones necesario para hablar con otros miembros de la tripulación y el control de la misión.
Antes de que la primera mujer y el próximo hombre den un paso en el Polo Sur lunar en 2024, la NASA probará los nuevos trajes y varios de sus componentes en la Estación Espacial Internacional en un entorno de vuelo espacial para confirmar el rendimiento general.