Exposición a 3 años de cárcel
Una mujer que abandonó a un recién nacido en un bolso supuestamente ha huido a Nicaragua, lo que representa una de las principales razones por las cuales las autoridades aún no han logrado dar con su paradero, según fuentes extraoficiales. Esta línea de investigación es seguida por las autoridades competentes.
Recientemente se ha dado a conocer que la mujer dejó al bebé en una gasolinera del barrio Nazareth en Liberia. Una persona que fue testigo del abandono rápidamente llevó al neonato al servicio de Emergencias del Hospital Dr. Enrique Baltodano.
El caso
Marvin Palma, director del centro médico, confirmó que el bebé se encuentra en condiciones estables y fuera de peligro. “El niño tiene más de 24 horas de nacido, de acuerdo con los neonatólogos, y se encuentra en buenas condiciones. Está siendo monitoreado por un equipo de expertos y no ha presentado ningún síntoma desfavorable”, señaló.
El director del hospital también indicó que el bebé está bajo custodia del centro, a disposición del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y del Patronato Nacional de la Infancia (PANI). “Hasta el momento, nadie ha ido a reclamarlo, pero está en buen estado y tolerando la alimentación a base de fórmula”, añadió.
Un hombre, junto a otras personas, decidió actuar al ver que en el bolso había un recién nacido y se dirigió de inmediato al centro médico para brindarle asistencia.
El OIJ ha corroborado la teoría de que fue una mujer quien abandonó al bebé y se fugó del lugar, no obstante, hasta la fecha no ha sido localizada.
Tres años de cárcel
La persona que abandonó en Liberia a un bebé de solo 36 semanas de gestación se enfrenta a una pena de hasta tres años de cárcel, según estipula el Código Penal. Este delito conlleva una sanción que varía de seis meses a tres años de prisión, bajo el artículo 142 del Código Penal.
Dicho artículo establece: “El que pusiere en grave peligro la salud o la vida de alguien, al colocar a esa persona en estado de desamparo físico, sea abandonando a su suerte a quien no puede valerse por sí mismo, y a quien se deba mantener o cuidar, o a quien el mismo autor haya incapacitado”.
Además, se contempla una pena de prisión de tres a seis años si como consecuencia del abandono se causa un grave daño físico o a la salud de la víctima; y, en caso de muerte, la pena puede ascender de seis a diez años de prisión.
Rodolfo Meneses, abogado del PANI, afirmó que se está evaluando la posibilidad de interponer una denuncia por el delito cometido al tratarse de una persona menor de edad.
«La situación ya ha sido informada a la oficina local de Liberia, la cual ha iniciado el proceso especial de protección y está a la espera del alta médica del menor para poder ofrecer la protección adecuada», afirmó el representante de la institución.
Asimismo, se indicó que se está a la espera del informe de Trabajo Social del hospital y que, durante todo el proceso, se están implementando acciones psicosociales y legales para asegurar el bienestar integral del niño.
Una vez que sea dado de alta, el menor quedará bajo la protección del PANI. En caso de que no se logre localizar a familiares, una de las alternativas será su adopción.
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