Mujeres pueden escoger posición en la que quieren parir a su bebé, recuerda CCSS. Cada día, decenas de mujeres costarricenses atraviesan el proceso del parto.
Este es un escenario complicado por sí solo, por lo que Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) ha intentado implementar ciertos beneficios para alivianar la experiencia para las usuarias.
Uno de ellos es decidir la posición en la que desean tener a su hijo, en caso de que se trate de un parto natural.
«Puede elegir la posición en la que desea parir, tienen derecho a deambular, pueden escoger alternativas para el manejo del dolor como lo es la musicoterapia, la hidroterapia, aromaterapia, todas estas cosas (…) Me ha tocado atender hasta un parto vertical de espaldas», indicó la doctora Carla Gríos, coordinadora del programa de la Mujer en la CCSS.
Estas últimas opciones que menciona se refieren a las alteraciones en el ambiente destinadas a ayudarle a la paciente en el proceso, como, por ejemplo. Colocar los olores de su gusto, escuchar música, hacerse masajes e incluso darse baños de relajación.
Todo esto es algo que las mujeres pueden solicitar oficialmente desde el año 2017, si así lo permite el contexto de su parto.
«Si ella está sola se le puede poner la música que ella quiera, pero si está con otras pacientes tiene que ser algo consensuado entre las usuarias, que todas se sientan bien», añadió.
Por otro lado, la mujer también tiene derecho a estar acompaña durante todo el proceso. Desde que llega al centro médico y hasta que sale, así como estar alimentada e hidratada durante el tiempo que los médicos consideren adecuado.
Según la experta, lo único que sí debe ser consensuado entre los padres y el médico es la vía de parto. Es decir, si es natural o por cesárea. En ambos casos, asegura, la decisión debe estar respaldada por un profesional.
«No es que usted llega a decir que quiere una cesárea porque ese es su deseo, tiene que haber una indicación técnica específica porque conlleva sus riesgos. En la institución promovemos el parto natural y que se hagan las intervenciones que la usuaria necesita únicamente.
«Las mujeres deben escoger la manera en la que se sientan más cómodas porque es un derecho de ellas y su vivencia, no soy yo la que siento, es ella la que siente, entonces ella es la debe decir la manera en la que desea parir», detalló Griós.
Muchas usuarias señalan que estas medidas no se cumplen
Según la CCSS, todo este proceso de educación inicia desde el momento de preparación del parto que imparte la institución. Ahí es donde se les informa a las futuras madres sobre todos sus derechos.
Sin embargo, una usuaria que dio a luz en octubre de este año en el Hospital Calderón Guardia. Que prefirió mantener su identidad en el anonimato, y que indicó que esto no siempre se cumple.
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Primero, aseguró que, contrario a lo que indica la institución, durante su experiencia de parto no siempre se le permitió estar acompañada
«Yo ingresé al hospital con la fuente rota y me pasaron a valoración en Emergencias. En ese momento a mi esposo no lo dejaron pasar, yo sí tuve que entrar sola. Luego me pasaron a otra sala para revisar al bebé y ahí tampoco dejaron que me acompañara nadie», aseguró.
Además, indicó que, a pesar de que sí llevó un curso acerca de sus derechos, al momento de internarse en el hospital ningún funcionario le informó que esto era posible.
«A mí en lo personal nunca me mencionaron nada de lo de la aeroterapia o nada parecido. Yo lo sabía porque ya me habían dicho en un curso, pero en el hospital no se lo explican a ninguna de las pacientes», añadió.
Además, cuenta que la banda que le colocaron en el hospital público para medir las contracciones estaba mala. Por lo que le hicieron un procedimiento que nunca le fue informado, entregándole la información, nuevamente, «a medias».
Con información de / Teletica
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