La Variante Delta del Covid-19 genera una grave situación en el país. El informe más reciente sobre el COVID-19 realizado por la Universidad Hispanoamericana enciende las alarmas. ya que, los expertos consideran que la pandemia alzó vuelo nuevamente en el país, con indicadores preocupantes.
El epidemiólogo Ronald Evans señaló que finalizan once semanas consecutivas de disminución del número promedio diarios de casos; para dar paso a un aumento sustantivo de enfermos. El promedio de casos diarios subió de 1.173 a 1.413, es decir, 240 enfermos nuevos que representan un aumento del 20.5%.
“Estamos entonces, en un momento grave, con un nuevo ascenso de la curva, que podemos atribuir, casi con absoluta certeza, a la acción de la variante Delta, que se sabe, cuando menos tiene el doble de contagiosidad que la variable Alfa. No conocemos su exacta distribución en el país, debido a la escasa capacidad diagnóstica del genoma viral con que contamos, pero es de suponer, dada su conocida capacidad de expansión, como lo atestiguan muchos países europeos y los Estados Unidos, que ya está distribuida en gran parte del país”, detalló el doctor.
El 50% de los cantones está en alerta roja, cuando la semana antepasada era solo el 24%. Al 7 de agosto, Guatuso ocupaba el primer lugar con una tasa de casos de 668 por cada 1.000.000 de habitantes. Le siguen Zarcero con 621.2 y Acosta con 587.9.
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En cuanto a la velocidad del comportamiento del virus a nivel nacional, los datos arrojan que la tasa básica de reproducción es de 1.13. San José encabeza con 1.18, Alajuela 1.15 y Cartago 1.13. El indicador más bajo es de 1.04 en Guanacaste.
Este comportamiento impactó la tasa de incidencia ubicándose en 273.7 por cada 1.000.000 habitantes, tras un aumento de 46.5. Las principales tasas en provincias están en Alajuela (368.3), Guanacaste (305.5) y Puntarenas (285.3).
Otro detalle que aporta el informe es la pérdida de personas jóvenes y productivas.
Al revisar el periodo de enero a la primera semana de agosto, el aumento fue del 192.75% de años no vividos, lo que Evans y su equipo consideran “un fuerte golpe para el país al perder personas en plena vida con importantes habilidades o talentos”.
Datos brindados por Institute for Health Metrics and Evaluation (IHME), de la Universidad de Washington el uso de mascarilla en Costa Rica ante el anuncio de nuevas variantes pasó de 84 a 92%, cuando lo esperable es del 95%.
Con información de Crhoy
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