El desarrollo clínico y tecnológico, la regulación de los estudios y el protagonismo que han adquirido los pacientes son algunos de los logros más importantes conseguidos en el ámbito de la sanidad en los últimos veinte años. Los retos para la próxima década, 2020-2030, muy ligados a la cronicidad y la longevidad de la población, los exponen responsables de organizaciones colegiales de medicina, farmacia, enfermería y psicología
Cambio de década, acabamos de entrar en 2020. EFEsalud hace balance de los veinte años que llevamos de siglo XXI en el campo de la salud y explora los retos a los que debemos hacer frente en los diez próximos.
Hemos entrevistado para ello a responsables de distintas organizaciones colegiales del ámbito de la medicina, la enfermería, la psicología y la farmacia: Miguel Ángel Sánchez Chillón, presidente del Colegio de Médicos de Madrid; Diego Ayuso, secretario general del Consejo General de Colegios de Enfermería; Fernando Chacón, presidente del Colegio de Psicología de Madrid; y Jesús Aguilar, presidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos.
Todos ellos coinciden en que el desarrollo tecnológico, la regulación y el reconocimiento de los estudios y sus especialidades, y el mayor protagonismo que han adquirido los pacientes, han sido las claves de estos últimos años, y los retos que plantea esta nueva década están muy ligados a la cronicidad y la longevidad de la población. El objetivo es, como explican, seguir trabajando para situar definitivamente al paciente en el centro del sistema sanitario.
En el ámbito de la medicina
Como explica a EFEsalud el doctor Miguel Ángel Sánchez Chillón, presidente del Colegio de Médicos de Madrid (ICOMEM), “el crecimiento, tanto en la medicina como en el resto de la comunidad científica, ha sido exponencial durante los últimos años, como indica el aumento de la supervivencia de muchas enfermedades, de la calidad de vida, de la longevidad y de los avances tecnológicos que se han conseguido en todas las áreas”.
Con respecto a estos últimos, explica que el gran reto es saber gestionar toda la información que se genera, ya que “tecnológicamente es mucho más fácil de tratar que desde el punto de vista humano. No todo es análisis de datos, sino que también hay que hacer un análisis de las circunstancias biológicas, psicológicas y sociales de los pacientes. Tendremos que aprender a ver a la persona como lo que es, un ser humano, y no solo como un caso clínico o como un problema de salud”, explica.
Y es que, aunque para Miguel Ángel Sánchez el protagonismo que han adquirido los pacientes es uno de los mayores logros alcanzados a nivel social, queda mucho por hacer en este campo. “Para que el paciente tenga autonomía para tomar decisiones sobre su vida y sobre su salud hay que darle información completa, accesible e inteligible. Es a partir de ese momento cuando tendrá capacidad para decidir por sí mismo”, asegura.
Otro reto que plantea el presidente del ICOMEM es la mejora de la asistencia sociosanitaria de una población cada vez más envejecida y más cronificada. “Ya no solo hay que tratar y curar, sino cuidar a esos pacientes y mantener su calidad de vida. Esto va a generar un alto consumo desde el punto de vista económico, social y de recursos en los próximos años”, apunta.
Con respecto a las fake news y la información falsa sobre salud que circula por las redes, asegura que desde organizaciones como la que representa están trabajando para “concienciar a la gente de que hay que tener unos criterios a la hora de analizar la información que recibimos y hacerlo de una forma objetiva”, aunque asegura que este tipo de informaciones “están abocadas a la autolimitación porque “de seguir aumentando, harían que los sistemas de información perdiesen credibilidad”.
En el campo de la enfermería
Para el secretario general del Consejo General de Colegios Oficiales de Enfermería (CGE), Diego Ayuso, el avance más importante de estos 20 años en la profesión se ha producido a nivel académico.
“Con la implantación del Plan Bolonia nuestros estudios pasaron de ser una diplomatura de tres años a un grado de cuatro. Esto nos ha permitido acceder a los estudios de máster y doctorado de la misma forma que el resto de disciplinas, algo muy importante en términos de reconocimiento profesional y de desarrollo en el campo de la investigación”.
En cuanto a la incorporación de las tecnologías, asegura que estas también han sido de gran ayuda. “Nos han permitido, por ejemplo, ofrecer teleasistencia o asesorar a compañeros de atención primaria. Gracias a ellas podemos ver la glucemia capilar o la presión arterial de un paciente y orientarle sin necesidad de que se desplace a la consulta”, añade.
En cuanto a los retos para la próxima década, asegura que los esfuerzos están enfocados en el ámbito asistencial y gestor, y reivindica, una vez más, la adquisición de una mayor relevancia en el sistema sanitario español.
“Somos personal estratégico para dar respuesta a las necesidades de una población cada vez más envejecida. La previsión es que en el año 2060 haya 14 millones de personas mayores de 65 años, el 30 % de la población. La gente va a necesitar cuidados, algo en lo que somos expertos. Hay que apostar por el papel de la enfermería como líder de cuidados y referente asistencial para el paciente, potenciar la educación sanitaria y la asistencia domiciliaria. Es además costo eficiente, ya que todas las medidas de prevención van a suponer una inversión a largo plazo”, sentencia.
Para ello es fundamental, explica Ayuso, la integración de los enfermeros y enfermeras en los puestos de toma de decisiones de estrategias políticas de salud.
“Se ha dado un pasito en este último año, en 2019, con la incorporación de la figura del Director General de Cuidados de Enfermería en comunidades como Asturias, Castilla-La Mancha, Navarra o La Rioja, que se han sumado a Baleares. Sigue sin ser suficiente porque no está implantado en todas las comunidades autónomas, pero es un poco lo que estamos reclamando, puestos de decisión de primer nivel”.
Recalca, además, el orgullo que supone para la profesión que la OMS haya declarado 2020 Año Internacional de la Enfermera y la Matrona. Para Ayuso, una muestra más de la necesidad de empoderar a este colectivo y un reconocimiento al valor de su trabajo.
Así afronta la psicología la nueva década
Fernando Chacón, Decano-presidente del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid, explica que en este área “ha sido fundamental el reconocimiento social de la disciplina, que se traduce también en una mayor demanda de los servicios psicológicos. Ahora es frecuente escuchar en las conversaciones cotidianas palabras como expectativa o autoestima, cosa que hace 20 años era impensable”.
“También se ha conseguido el reconocimiento del carácter científico de la psicología, se ha afianzado como disciplina científica independiente. Y, por supuesto, se ha empezado a regular la psicología como profesión sanitaria, con la especialidad de psicología clínica y el máster de psicología general sanitaria. Todavía es una regulación incompleta, pero es un avance muy importante”, apunta.
En cuanto a los retos que se plantean para la nueva década, “lo primero es crear nuevas especialidades sanitarias dentro de la psicología. Actualmente está la psicología clínica, pero creemos imprescindible crear las especialidades de psicología clínica infantojuvenil, de cuidados paliativos y la de neuropsicología”.
Y añade: “También consideramos necesaria la regulación de la psicología forense a través de la creación de una especialidad sanitaria. Los informes forenses que se hacen en casos de separación para establecer la guarda y custodia de los niños o para conceder permisos penitenciarios, tienen una repercusión enorme sobre la vida de las personas y tenemos que exigir una formación específica para poder llevarlo a cabo”.
Otro de los objetivos fundamentales que se plantean es mejorar la accesibilidad a los servicios psicológicos que, como explica Chacón, “en España en el ámbito público es muy escasa. En los centros de salud a lo mejor hay listas de espera de cuatro meses, solo para empezar, y luego las terapias de continuación son cada dos. Los recursos son muy escasos y hay que mejorar la accesibilidad de toda la población”, afirma.
Por último subraya la importancia de implantar la psicología en los colegios públicos donde esta figura actualmente no existe. “Creo que es necesario que se ofrezca este servicio, y más con la complejidad de los temas que ahora mismo se tratan en un colegio, como el bullying o menores con ideas suicidas; problemas muy serios para los que es fundamental esta figura que antes existía pero que ha sido excluida”, concluye.
Los retos de la farmacia
Para conocer el punto de vista de los profesionales de la farmacia, EFEsalud ha entrevistado a Jesús Aguilar, presidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos.
Haciendo balance explica que “en los últimos 20 años la profesión farmacéutica y el Sistema Nacional de Salud han dado un paso de gigante, sobre todo desde la implantación de la Ley de Garantías y Uso Racional de Medicamentos en 2006. Como marcan las encuestas, somos uno de los países con mejor sistema de salud y, por tanto, de mejor prestación farmacéutica”.
Con respecto a la implicación que el avance tecnológico ha tenido en este campo, el presidente del Consejo asegura que “la farmacia siempre ha estado a la cabeza de las tecnologías, las empleábamos ya en los 90, cuando todavía eran algo poco común en nuestra sociedad”.
Añade que son “un valor fundamental para garantizar una mejor prestación farmacéutica a los ciudadanos. Un buen ejemplo de ello es la receta electrónica, que garantiza la retirada de medicamentos en cualquiera de las más de 22.000 farmacias que tenemos en España, la red más grande de toda Europa”.
Con respecto al creciente empoderamiento de los ciudadanos a la hora de tomar decisiones sobre su salud afirma que todavía es una intención y no una realidad y las administraciones deben trabajar para integrar realmente al ciudadano en el sistema.
“El farmacéutico puede tener un papel muy importante en esta cuestión, porque es un agente esencial de salud en todos los ámbitos. Nuestros pilares son la cercanía, la accesibilidad y la confianza de los ciudadanos, algo fundamental a la hora de establecer esa comunicación con ellos. El primer lugar al que los ciudadanos acuden la mayoría de las veces es a la farmacia que está debajo de su casa. Es donde tenemos que reforzar ese primer nivel asistencial del sistema sanitario.”, explica.
En cuanto a los retos a los que habrá que dar respuesta en la próxima década, resalta, al igual que sus compañeros, la cronicidad, la polimedicación, el envejecimiento y la dependencia. “Nuestra población está cada día más envejecida y tiene más cronicidad, por lo que necesita a ese farmacéutico cercano que le ayude y le acompañe en todo lo que tiene que ver con la salud y con la medicación”.
Y añade: “también es muy importante fortalecer la colaboración del farmacéutico con el resto de profesionales sanitarios que integran los equipos multidisciplinares de salud. Para ello es necesario que avancemos en la sostenibilidad de las farmacias, si no son sostenibles económicamente no podremos llevar a cabo ese desarrollo asistencial”.
Vía – EFE