MANAGUA —
Tras la suspensión de las negociaciones por parte del gobierno con la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, sus integrantes y otros sectores sociales se reorganizan para sostener las demandas que desde abril del año pasado se le hacen al presidente DanielOrtega.
José Pallais, integrante de la Alianza, aseguró que seguirán exigiendo el adelanto de elecciones, el respeto a las libertades ciudadanas y justicia para los crímenes de lesa humanidad.
“Requiere reenfocar la lucha del pueblo de Nicaragua, para tener incidencia en que podamos asegurar elecciones anticipadas, pero verdaderas, que se garantice que los nicaragüenses puedan escoger, decidir con su voto, lo cual se ha negado todo este tiempo por el régimen”, indicó Pallais.
Mientras el gobierno mantiene cerrada la posibilidad de retomar las negociaciones, la vicepresidenta de la República y esposa de Daniel Ortega, Rosario Murillo,aseguró a medios oficiales que trabajan en la reconstrucción del país. un proceso en el que aseguró “el mal” quedó relegado.
“Todos queremos un futuro lleno de luz y lleno de bienestar para las familias. Un futuro de derechos que continuemos restituyéndonos, aquí no cabe la negatividad, aquí no cave el odio, eso queda relegado para las oscuras, tenebrosas, tétricas paginas de la historia del mal en Nicaragua”, indicó Murillo.
El gobierno ha dado por finalizadas las negociacionesdejando en el limbo el cumplimiento de acuerdos relacionados con las libertades ciudadanas, la liberación de todos los presos políticos y el retorno seguro de los exiliados. La oposición, por su parte, organiza una gran coalición opositora para hacerle frente alincierto futuro político de la nación.