Las obras de reconstrucción de la catedral de Notre Dame han comenzado este lunes 19 de agosto tras haber estado tres semanas paralizados debido a los riesgos para los trabajadores por exposición al plomo.
La inspección de trabajo dio luz verde a la reanudación de esta obra tras «garantizar la seguridad del personal». Lo que ahora dará inicio es un trabajo de «consolidación» destinado a reforzar determinados espacios de la catedral que se habían quedado en riesgo de derrumbe, tal y como recoge Europa Press de medios franceses.
Al final de esta fase, empezará otra de restauración que no se prevé hasta mediados de 2020. Entre los elementos a reconstruir se incluyen la aguja, el techo y parte de la bóveda, si bien todavía se está a la espera de conocer las empresas que lo llevarán a cabo y alguna posible novedad en el diseño.
El proceso de reconstrucción se detuvo el pasado 25 de julio debido al riesgo de contaminación por plomo para los trabajadores de la zona. El incendio que devastó parcialmente Notre Dame el 15 de abril derritió varios cientos de toneladas de plomo, algunas de las cuales se evaporaron en partículas en la atmósfera y en el suelo.
Desde el incidente, se han observado altos niveles de concentración de plomo en todo el edificio y el 13 de agosto se inició una descontaminación de los terrenos alrededor de la catedral.