Alias “Gorilón”, el hombre que creó un emporio narco en la Zona Norte, se declaró culpable junto a 25 personas más que conformaban su mega banda. Todos los integrantes ya descuentan prisión, tras aceptar un procedimiento abreviado. La organización fue desarticulada en octubre del 2017 en uno de los operativos más grandes que se hayan ejecutado en la Zona Norte.
El cabecilla de la organización, de apellidos Ramos Zúñiga, supuestamente llegó a tener micro células de hasta 14 personas y ganancias mensuales por ¢40 millones de colones. Él aceptó cargos y pasará los próximos 10 años en la cárcel.
Al líder se le identificó como un sujeto que empezó a vender drogas en solitario en el año 2010, pero creció hasta tener jerarquía sobre un grupo de más de 30 personas.
Las autoridades judiciales lo señalaron como un hombre con “varias familias”, con varios camiones y que se dedica al transporte de maderas. Además en los últimos años empezó a comprar parcelas -muchas sin inscribirse- y rodeado de licor, mujeres y juego. No obstante, vivía en una casa poca ostentosa.
Este grupo tenía su centro de operaciones en Santa Rosa de Pocosol, mas tenía ventas en Ciudad Quesada, Santa Fe de Aguas Zarcas y San José del Amparo de Los Chiles.
La investigación del OIJ determinó que los hombres comprobaban cerca de ¢10 millones en drogas cada 15 días.
Junto a Ramos, también operaba su hermano y 2 sujetos de apellidos Sánchez y Mora. Ellos llevaban la batuta en la banda, pero fueron sorprendidos en una operación llamada “Gorila”. En los allanamientos participaron 400 agentes judiciales.