El gobierno turco indicó este miércoles que contaba con Rusia para poner en marcha el acuerdo sobre Siria alcanzado la víspera, ya que no tiene «plena confianza» en el régimen de Damasco y el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, aseguró que tomará «las medidas necesarias» si la retirada kurda no se produce tal y como está establecido en este pacto.
Erdogan y Putin concluyeron el martes un acuerdo según el cual Moscú tiene que facilitar la retirada de la milicia kurda de las Unidades de Protección Popular (YPG) de las zonas que controla en la frontera turca.
Militares rusos y sirios tenían que empezar a patrullar conjuntamente en algunos sectores.
«Rusia está determinada, pero respecto al régimen, no conseguimos tener plena confianza», declaró el jefe de la diplomacia turca, Mevlüt Cavusoglu, en una entrevista a la agencia estatal Anadolu.
«¿Podría el régimen cooperar con (las YPG)? Es posible. Si es el caso, haremos lo necesario», añadió Cavusoglu, afirmando que Putin prometió a Erdogan que transmitiría un «ultimátum firme» a los combatientes kurdos para que se retiren.
Y en caso de que la retirada de las milicias no se realice como ha sido pactado, «se tomarán las medidas necesarias. No hemos cambiado de opinión al respecto», dijo Erdogan, citado por la prensa local.
Turquía lanzó el 9 de octubre una ofensiva contra las YPG, un grupo que considera «terrorista», pero que apoyó a los países occidentales en su lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Ankara interrumpió su operación la semana pasada tras un acuerdo con Estados Unidos que preveía la retirada de las YPG a más de 30 km de la frontera turca, en una franja de 120 km de largo, entre las ciudades de Tal Abyad y Ras Al Aín.
El acuerdo concluido con Rusia el martes incluye la retirada, en un plazo de 150 horas a partir de las 09H00 GMT de este miércoles, de las YPG de las zonas restantes de la frontera turca entre el río Éufrates y la frontera iraquí.
Vía – AFP